Ecuatorianos arriesgan sus vidas en la peligrosa selva del Darién: De 387 que cruzaron en todo el 2021 pasó a casi 7000 migrantes de enero a septiembre de 2022

La densa y peligrosa selva del Darién, que comunica a Colombia y Panamá, ha visto descender ligeramente el número de migrantes que la atraviesan.

El cambio se nota desde que Estados Unidos anunció el 12 de octubre de 2022 una nueva política con la que todo nacional de Venezuela que llegue al país tras haber cruzado irregularmente esa frontera será expulsado de inmediato a México.

Un reportaje de EFE reseña que según cifras del Gobierno panameño, mientras la semana después del anuncio llegaron a cruzar hasta casi 6.000 personas en un día el Darién, actualmente son menos de 3.000 al día. Un número aún significativo y muy superior al de otros años, pero en una tendencia descendente.

Entre octubre de 2021 y agosto de este año, más de 150 mil venezolanos fueron arrestados en la frontera sur de Estados Unidos en comparación con los 50 mil 499 en el mismo periodo del año anterior.

Más ecuatorianos atraviesan el Darién

Pese al leve descenso de migrantes en las últimas semanas, la Defensoría del Pueblo de Colombia hizo un anuncio preocupante este lunes 24 de octubre: el paso de ecuatorianos por el Darién va en aumento.

Casi 7.000 ecuatorianos pasaron la frontera entre Colombia y Panamá entre enero y septiembre de este año, lo que supone un aumento de más de 1.000 % de migrantes que escogen esta brutal ruta en su intento por llegar a Estados Unidos, pública EFE.

Un comunicado de la Defensoría colombiana señala que en los últimos meses se ha registrado un aumento considerable de la migración de ecuatorianos hacia Colombia “por el Puente Internacional Rumichaca que se dirigen hacia los municipios de Necoclí (Antioquia) y Acandí (Chocó), para continuar para la selva del tapón del Darién y llegar a los países del norte del continente”.

"Durante todo el año 2021 pasaron la frontera 387 personas de nacionalidad ecuatoriana; y de enero a septiembre de este año, ya se han registrado 6.698 personas de nuestro país vecino que han traspasado la frontera con Panamá”.

Las cifras las dio el defensor colombiano Carlos Camargo, en la apertura del Encuentro binacional de las Defensorías del Pueblo de Colombia y Ecuador.

Desde el Puente Internacional de #Rumichaca los Defensores del Pueblo de Colombia @DefensoriaCol y Ecuador @DEFENSORIAEC ratifican su compromiso binacional en la lucha contra la trata de personas.

¡#PonteElCorazónAzul! Es su llamado a la prevención de este flagelo. pic.twitter.com/z9HPKwXs3s

— Defensoría del Pueblo (@DefensoriaCol) October 24, 2022

Detalló que los picos más altos de esta migración fueron durante los meses de agosto, con 1.581 personas, y septiembre con 2.594 personas, “una cifra significativa que nos lleva a alertar sobre los riesgos que corren estas personas migrantes", refiere en su alerta.

Desde Ecuador, el Ministerio del Interior señala que solo en agosto de este año 12.252 ecuatorianos abandonaron el país a través de la frontera con Colombia, en la que solo basta presentar el documento de identificación para cruzar al país, agrega el comunicado.

Ipiales, punto de salida

El reporte de EFE señala que es la ciudad colombiana de Ipiales, en la frontera con Ecuador, uno de los núcleos de la ruta migratoria.

Desde ahí se toman buses que llevan hasta el municipio de Necoclí, en el departamento de Antioquia, en una ruta totalmente vertical hacia el norte y desde donde los migrantes cogen lanchas para atravesar el Caribe en el Golfo del Urabá y emprender la ruta por la selva.

"Es por este aumento en el número de migrantes que el Defensor del Pueblo hace un llamado a las entidades estatales de los países latinoamericanos a que adopten políticas publicas que desincentiven la migración irregular", apunta la Defensoría en su comunicado.

2022 es el año que más personas han cruzado el Tapón del Darién desde que hay registros. Son más de 200.000 personas, más del 70 % venezolanas, que se adentran en una caminata que puede durar hasta una semana por empinadas montañas enlodadas, ríos que crecen por las lluvias y una selva donde hay presencia de criminales y grupos armados. (I)