¿Por qué la cinta "El Infierno" no le gustó al Presidente de México? ¡Estas fueron las opiniones de los expertos sobre la película dirigida por Luis Estrada!

México lleva más de 100 años dentro de la industria cinematográfica. A través del cine, el país azteca nos ha contado diferentes historias que reflejan la realidad del país y cultura, convirtiéndolo en uno de los movimientos artísticos más famosos del mundo. En este caso, "El infierno" (2010) es una película que ha dado mucho de qué hablar durante los últimos años por su manera de representar a dicho país.

¿De qué trata la cinta?

Dirigida por Luis Estrada, la producción nos presenta la historia de Benjamín "Benny" García, un hombre que al ser expulsado de los Estados Unidos regresa a su pueblo. Al llegar, se encuentra con una tierra asolada por la violencia, el crimen organizado y la crisis económica. Por lo tanto, Benjamín deberá involucrarse en el tráfico de drogas para sacar adelante a su familia.

Opiniones sobre la cinta "El Infierno"

Violencia y más violencia

Según el portal Proceso, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), calificó la película de violenta, ya que presenta a las personas de Oaxaca como personas agresivas, sin tener en cuenta que "en las comunidades de Oaxaca es donde hay más cultura". Asimismo, el mandatario reiteró su compromiso de mantener los valores culturales para que las personas no se vuelvan parte de las "conductas antisociales".

Una pequeña metáfora de México

Teniendo en cuenta que todo sucede en un pueblito, Clarín afirma que es una metáfora de México: Al protagonista lo deportan de Estados Unidos tras vivir como ilegal por 20 años. Regresa a su lugar natal San Miguel Arcángel, y descubre que los narcotraficantes controlan todo. Y más temprano que tarde, se da cuenta que esa es la única forma de surgir. Entonces, la pobreza y la falta de oportunidades son territorio fértil para el narcotráfico, añade el portal.

Personajes simpáticos en un contexto grotesco

Por otro lado, el diario La Nación afirma que la película no aborda el tema del narcotráfico con sutileza, por lo que es totalmente explícita con lo que quiere mostrar, con el fin de llamar al debate. Sin embargo, no todo es grotesco o macabro en el largometraje. Luis Estrada retrata a los protagonistas de tal manera que podamos distinguirlos entre los asesinos simpáticos y los asesinos villanos.

(E)