Daiko, el perro maravilla de Portoviejo que "trabaja" como ayudante en un taller de mecánica
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Daiko, “el perro maravilla” de Portoviejo que “trabaja” como ayudante en un taller de mecánica

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Luis Vélez Molina encontró en su perro Daiko, un Golden Retriever de dos años y medio, no solo a un mejor amigo sino a un compañero de trabajo en el taller de mecánica automotriz donde “laboran” los dos, en la parroquia Río Chico, de Portoviejo, en la provincia de Manabí. Pese a no recibir ningún […]

Perro Daiko Portoviejo
El perro Daiko de Portoviejo es un Golden Retriever y tiene dos años y medio. Foto referencial: Pixabay / No-longer-here
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Luis Vélez Molina encontró en su perro Daiko, un Golden Retriever de dos años y medio, no solo a un mejor amigo sino a un compañero de trabajo en el taller de mecánica automotriz donde “laboran” los dos, en la parroquia Río Chico, de Portoviejo, en la provincia de Manabí.

Perro Daiko Portoviejo

El "perro maravilla" llaman a Daiko en la parroquia Río Chico de Portoviejo. Foto: Capture de conexionnoticiasec.com/

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Pese a no recibir ningún entrenamiento, el can ha demostrado ser tan inteligente que aprendió tareas cotidianas que dejan sorprendido a Luis, a los otros mecánicos del taller y al barrio, donde le dicen “el perro maravilla”, como cuenta Conexión Noticias en una crónica de Jorge Ampuero V.

Cuando Luis no tiene al alcance de la mano alguna herramienta, Daiko como todo un ayudante de mecánica se encarga de buscarla y llevársela “esté donde esté”. Solo hace falta que su dueño, o mejor dicho, su amigo le pida ayuda.

“Tráigame, por favor, un aceite 40”, le dice Luis a Daiko y éste se levanta, va a la bodega y trae lo que le solicitan, según aseguran los trabajadores del taller. Pero lo que sí le consta al cronista, es que el can es capaz de buscar una escoba y una pala para recoger la basura y una vez Luis termina de usar los implementos de limpieza, los coloca de nuevo en donde los encontró.

Luis y Daiko cumplen un horario laboral en el taller ubicado a 50 metros de la casa. Si Luis debe salir en su moto, el perro sabe que para acompañarlo debe ponerse un casco, lo busca y espera que se lo pongan para saltar a la unidad muy gustoso. Cuando por fin están en la casa y Luis se queja de que "está cansado", Daiko le busca un taburete de madera para que descanse. Sin duda, Daiko es la mano derecha de su buen amigo.

(I)

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