Quién fue Gilberto Rodríguez Orejuela, jefe del Cartel de Cali
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Quién fue Gilberto Rodríguez Orejuela, al excapo del Cartel de Cali que desafió a Pablo Escobar lo capturaron hace 27 años, un perfume y un vaso roto lo delataron (VIDEO)

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Cumpliendo una condena de 30 años de prisión, que le dictaron a comienzos del 2000, falleció en Estados Unidos el exnarcotraficante colombiano Gilberto Rodríguez Orejuela. El excapo tenía 83 años y su nombre para siempre estará vinculado al pasado violento que sacudió a su país. Rodríguez Orejuela fue uno de los jefes y fundadores del […]

El exjefe del cartel de Cali Gilberto Rodriguez Orejuela, en una fotografía de archivo de 2004. Foto: EFE/Stg
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Cumpliendo una condena de 30 años de prisión, que le dictaron a comienzos del 2000, falleció en Estados Unidos el exnarcotraficante colombiano Gilberto Rodríguez Orejuela.

El excapo tenía 83 años y su nombre para siempre estará vinculado al pasado violento que sacudió a su país.
Rodríguez Orejuela fue uno de los jefes y fundadores del Cartel de Cali, liderazgo que compartía con su hermano Miguel.

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Eran los tiempos de la mayor época de violencia por narcotráfico en Colombia, cuando el abatido capo Pablo Escobar (1949-1993) dirigía el Cartel de Medellín, reseña EFE.

Al excapo lo llamaban “El Ajedrecista” y estaba tras las rejas en Carolina del Norte desde finales de 2004 cuando fue extraditado después de que fuera capturado en Colombia en 1995.

Su detención el 9 de junio de 1995 fue celebrada por millones de colombianos.

La Policía lo halló escondido en una caleta, dentro de una vivienda. Hasta él llegaron tras delatarlo el perfume de uno de sus contadores y un vaso roto.

El general (r) Rosso José Serrano, exdirector de la Policía, contó que en la operación lo que más les preocupaba era que al detenerlo, y llevarlo a Bogotá, le diera un infarto.

De mensajero de farmacia al camino de las drogas

El "Ajedrecista" nació en la población de Mariquita, en el departamento del Tolima en enero de 1939.

Años más tarde, señala EFE, su familia se trasladó a Cali (Valle del Cauca) en donde comenzó a trabajar como mensajero de farmacias hasta convertirse en el poderoso narcotraficante que, incluso, desafió a su rival, el Cartel de Medellín, de Pablo Escobar.

En su momento, las autoridades colombianas dijeron que el mafioso tenía una flotilla de aviones y helicópteros, en las que transportaba alijos de cocaína que llegaban a Estados Unidos, todo en sociedad con otros carteles mexicanos y bolivianos.

Además, diseñó una red de corrupción que le permitió blanquear millones de dólares producto de las ganancias obtenidas por la venta del 80 % de la cocaína que compraban los consumidores en Estados Unidos.

Gilberto Rodríguez Orejuela murió la noche del martes a los 83 años en un prisión de Carolina del Norte. Foto: EFE/ Str

Diferencias con el cartel de Pablo Escobar

A diferencia del Cartel de Medellín, que era de poner bombas, matar policías, periodistas, jueces y directores de medios de comunicación, entre otros, su accionar fue diferente pues compró a todo aquel que no le permitía hacer sus ilícitos negocios.

Su movimiento más sonado fue que logró infiltrar la campaña presidencial de Ernesto Samper a la que aportó 6.000 millones de pesos (unos 1,5 millones de dólares de hoy) y que dio origen al llamado proceso 8.000.

En la época del Cartel de Cali se comenzaron a utilizar las más diversas formas para sacar la cocaína de Colombia hacia Estados Unidos: se camuflaba en cargamentos de frutas, café, verduras, postes de cemento.

Si bien el imperio de los Rodríguez Orejuela les habían dado la riqueza y las facilidades para vivir una vida ostentosa y recargada, los capos del cartel de Cali siempre fueron más bien modestos, con una flota de carros Mazda, aunque vivían en inmuebles donde el dinero se hacía presente con canchas de fútbol, discotecas y establos.

El arte de la “caleta”

"El Ajedrecista", como se conocía a Gilberto, también fue maestro del arte de la "caleta", unos reducidos espacios que los padrinos de Cali construían en sus lujosas casas para evitar ser capturadas en una posible redada policial.

Y si bien Pablo Escobar declaró una guerra contra el Estado colombiano con la que a base de bombas y muertes pidió la suspensión de la extradición a Estados Unidos, los padrinos de Cali decidieron hacer otro tipo de guerra: a base de billetes comprando a políticos.

En este sentido, estuvieron envueltos en el conocido proceso 8.000, referente a la financiación que hicieron de la campaña del expresidente Samper con dinero del narcotráfico, encumbrandolo al poder con la promesa de que acabaría con la extradición.

Años después de entrar en la cárcel aseguraron que también inyectaron dinero a la campaña de Andrés Pastrana, quien fue el sucesor de Samper en la Presidencia para el periodo 1998-2002.

"Gilberto siempre prefirió los sobornos a la violencia, y eso lo caracterizó junto a una personalidad más templada y calculadora.

Eso le valió el apodo del "Ajedrecista" y le sirvió para relacionarse y tener contactos en la alta esfera colombiana.

El fútbol, su pasión

Los hermanos Rodríguez Orejuela se convirtieron en los accionistas mayoritarios del América de Cali a finales de la década de 1970.

Desde entonces los Diablos Rojos vieron pasar por sus filas a algunos de los mejores jugadores suramericanos de la época.

Los títulos abundaron y el éxito en torneos internacionales los llevó a la disputa de cuatro finales de Copa Libertadores, que perdieron en 1985, 1986, 1987 y 1996.

Sin embargo, la Oficina para el Control de Bienes Extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos declaró en 1996 a las compañías bajo el dominio de los Rodríguez Orejuela como peligrosas para la economía de ese país y el 8 de junio de 1999 el América de Cali entró a formar parte de la "Lista Clinton".

De inmediato las cuentas bancarias del club las cancelaron y ya no hubo patrocinadores ni firmas que respaldaran la gestión de la institución.

Cómo lo capturaron

Luego de una larga persecución, que le costó la vida a jueces, policías y políticos, a Gilberto Rodríguez Orejuela lo detuvo  un cuerpo de élite de las fuerzas de seguridad del Estado.

Su captura se logró el 9 de junio de 1995. Estaba escondido en una caleta de una vivienda de Cali, y era, en ese entonces, uno de los hombres más buscados en Colombia y en el mundo.

Cuando se vio sin salida dijo a Serrano: "General, usted ganó".

(I)

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