¿Pierdes constantemente las cosas? Haz esta poderosa oración a San Antonio y encuéntralas fácilmente

¿Te ha pasado que cuando estás apurado es cuando menos consigues lo que necesitas? Esto suele sucederles a muchas personas con algunas cosas, como por ejemplo las llaves de la casa, del auto, la billetera, el dinero, entre otros. Estas situaciones en la mayoría de los casos ocurren por distracción. Es por ello que te presentamos esta poderosa oración a San Antonio para que encuentres fácilmente todo lo que se te ha perdido.

El santo de las cosas perdidas es San Antonio de Padua puesto que se dedicó a ayudar a las personas en situaciones complejas practicando desde su propia fe, así como lo hizo en medio de sus conflictos, reseña La Opinión. Es por esta razón que los ciudadanos recurren a él a través de la oración.

Oración a San Antonio para las cosas perdidas

“San Antonio, glorioso siervo de Dios, famoso por tus méritos y los potentes milagros, ayúdanos a encontrar las cosas perdidas; danos tu ayuda en la prueba, e ilumina nuestra mente en la búsqueda de la voluntad de Dios.

Ayúdanos a encontrar de nuevo la vida de gracia que nuestro pecado destruyó, y condúcenos hacia la posesión de la gloria prometida por el Salvador. Te pedimos esto por Cristo nuestro Señor. Amén.”

Oración a San Antonio para las cosas perdidas y robadas

"Oh Dios Eterno y Poderoso Padre, Señor del cielo y de la tierra, que por Jesucristo, tu hijo, te manifiestas a los pobres a los sencillos y a los humildes, te damos gracias porque colmaste de tu amor al bienaventurado San Aparicio, para que viviera con sencillez de corazón aspirando a los bienes del cielo.

Concédenos que, por su intercesión alcancemos lo que pedimos, que su poderosa mano nos entregue cuanto antes lo que hemos perdido o nos ha sido sustraído: repite tres veces lo que deseas o necesitas recuperar.

Padre te alabamos y bendecimos y te damos gracias pues sabemos que nos escuchas y que tu misericordia no tiene fin, te rogamos atiendas nuestras suplicas y nos ayudes en los solicitado, para que, confortados en nuestros sufrimientos, contemplemos las maravillas de tu poder.

También te pedimos, nos aumentes la fe y la caridad para que, siguiendo el ejemplo de oración y devoción del bienaventurado san Aparicio te alabemos constantemente. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén”.

(E)