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¿Te molestan ciertos movimientos repetitivos de otras personas? aquí te decimos las claves de la misokinesia a la luz de la psicología
Si te molesta o altera el hecho de que tu amigo se siente cerca de ti y mueva una y otra vez una pierna y si esa compañera de trabajo habla contigo mientras no deja de lanzar al aire una pequeña pelota de goma o de jugar con un lápiz… es tiempo de saber qué es la misokinesia. ¡Sí! si te irritas por esos movimientos corporales que repiten sin parar otras personas a tu vista puede que padezcas de este fenómeno nuevo para la psicología.
Desde Psicología y Mente dicen: “Esta palabra es relativamente nueva, pero el fenómeno psicológico detrás de ella ya se sospechaba desde hacía un tiempo. Prueba de ello lo tenemos en una investigación neerlandesa del 2014, realizada por la Universidad de Ámsterdam en la que ya se anticipó la existencia de la misokinesia”.
Según la experta en yoga y pilates María Molero García, este fenómeno que viene analizando la psicología "es más común de lo que crees". Citando a 20minutos.es dice que "lo padecen 1 de cada 3 personas" y señala que se ha intensificado tras el confinamiento por la pandemia del covid-19″ La Universidad de Columbia Británica, en Canadá, define a la misokinesia como “un fenómeno que consiste en tener una manía hacia los movimientos de otras personas”, que puede generar "irritación, incomodidad y ansiedad". “La misokinesia es una alteración psicológica que suele venir acompañada con malestar e incomodidad al ver y escuchar a alguien que no para de hacer pequeños movimientos corporales repetitivos”, reafima Psicología y Mente.
En el estudio del 2014, “el grupo investigador de Arjan Schröder abordaba la misofonía, es decir, la irritabilidad de escuchar sonidos como el goteo de un grifo y oír a alguien masticar. Vieron que buena parte de su muestra experimental no solo se sentía incómoda ante ciertos sonidos, sino que además tenían la incomodidad de ver y escuchar determinados movimientos corporales".
Eso motivó a otro grupo investigador a analizarlo y nació el nombre de “misokinesia” del griego “miso”, que significa ‘odio’, y ‘kinesis’, que significa ‘movimiento”.
La misokinesia “no se considera un trastorno mental ni algo lo suficientemente grave por sí solo como para necesitar ayuda profesional”.
Dice Psicología y Mente: “Si sentirse incómodo ante los movimientos repetitivos de otras personas supone un grado de afectación elevado en la vida social, laboral, académica y familiar sí que sería recomendable acudir a un psicólogo para aprender técnicas de gestión de la ansiedad y aprender a dejar de fijarse en los tics de los demás”.
Según Recursos Humanos TV, los expertos subrayan que un estudio permitió conocer tres puntos esenciales:
1.Un gran número de personas tiene que lidiar con una mayor sensibilidad a la inquietud.
2. Se trata de un reto social básico y hasta ahora poco reconocido que comparten muchas personas de la población general.
3. Quienes lo padecen no lo pueden controlar al 100%, pero atenderse puede hacer un cambio significativo.
(I)
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