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¡Se hizo el muerto!: Hombre en situación de calle se salva de morir en medio de ataque a balazos que hacían extorsionadores a avícola en el norte de Guayaquil (VIDEO)
El lenguaje de los balazos. En ese habla e intimida la extorsión en la ciudad de Guayaquil.
Dos sujetos, la tarde del sábado 3 de septiembre, quedaron grabados cuando atacaron a tiros la fachada de una avícola, en la ciudad puerto. Sucedió poco antes de las 13:00.
El mismo video capta cómo un hombre, acostado en la acera, se quedó inmóvil, como muerto, para no ser visto por los extorsionadores.
Los dos delincuentes, de suéteres gris y blanco, ambos de gorras para ocultar más sus rostros, llegaron a pie hasta el frente del negocio y accionaron sus armas de fuego. El establecimiento, describió Teleamazonas, está situado en La Florida, en la vía Perimetral, norte de Guayaquil. Dos personas en ese mismo momento vieron pasar la muerte bien cerca. Uno, un hombre, que en situación de calle, estaba acostado en la acera, frente a la avícola.
Los gatilleros no parecieron percatarse de su presencia, pues estaba arropado con una sábana blanca. Claramente, se ve cómo se mueve y oculta más al escuchar las detonaciones. Vive para contarlo. Al retirarse los dos sujetos armados, el hombre en situación de calle se mueve y con él su sábana hasta que se ve sacar un poco la cabeza. Buscaba aire, respirar y pasar el susto de su vida.
El otro que se impactó con los balazos fue un albañil, contratado para realizar unas mejoras dentro del local de la avícola. Con las primeras detonaciones salió corriendo dejando sus implementos botados.
Este también salvó su vida de manera milagrosa. Los sujetos, tras cumplir con su objetivo de asustar, caminaron y, según conoció Teleamazonas se fueron en una motocicleta. Trascendió, en esa reseña periodística, que los dueños de la avícola 24 horas antes habían recibido una llamada en la que le exigían 3.000 dólares, como “vacuna” para no ser tocados por otros grupos delictivos.
Al negarse a cancelar, el sábado les hicieron la visita con balazos.
No es el único caso, según dicen comerciantes aledaños les piden de 300 a 500 dólares, por semana, por el mismo motivo de esta peligrosa seguridad.
La negativa la responden con explosivos, como se ha visto en muchas situaciones a lo largo del 2022.
(I)
Hombre en la calle se cubrió con su sábana y se hizo el muerto
Extorsión en aumento