Se acerca el Domingo de Ramos: ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!

Tras dos años de medidas en el marco de la pandemia del covid-19, que obligaron a conmemorar la Semana Santa a través de medios digitales, los ritos vuelven a ser presenciales, a partir del Domingo de Ramos, desde el Vaticano y en varios países.

El Domingo de Ramos, recuerda Aciprensa, abre solemnemente la Semana Santa, también llamada Semana Mayor, con el recuerdo de las palmas y de la Pasión, de la entrada de Jesús en Jerusalén y la liturgia de la palabra que evoca la Pasión del Señor en el Evangelio de San Mateo.

Este próximo 10 de abril, la Iglesia católica celebra el Domingo de Ramos, “día para conmemorar esa entrada de Jesús en Jerusalén, en la que la multitud lo recibió con gozo y lo aclamó como el Mesías".

“Las multitudes iban delante de Él y los que le seguían aclamaban diciendo: ¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor¡ ¡Hosanna en las alturas!” (Mateo 21:9)

En el Domingo de Ramos, "los fieles se congregan en sus parroquias para recibir del sacerdote la tradicional bendición de las palmas y participar en la procesión y la Misa Solemne, en la que se lee el relato de la Pasión de Cristo”, explica Aciprensa.

El Papa presidirá la Misa del Domingo de Ramos a las 10:00 am (hora en Roma) en la Basílica de San Pedro.

En su mensaje del 2021 por ese día, Francisco dijo: “Pidamos la gracia de asombrarnos”, en su homilía, argumentando que “una vida cristiana sin asombro se vuelve monótona y lúgubre”.

“Tenemos que ir más allá de la admiración a Jesús”, agregó, invitando a los cristianos a “seguir sus pasos, dejarse desafiar por él; pasar de la admiración al asombro”.

 

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Dos tradiciones de cara al Domingo de Ramos

Según Aciprensa, en esta fecha se entrecruzan las dos tradiciones litúrgicas que originaron la celebración del Domingo de Ramos: la tradición litúrgica de Jerusalén y la tradición litúrgica de Roma.

En la primera “se recuerda el gesto profético de Jesús siendo aclamado al ingresar como Rey de Paz y el Mesías, y después condenado para el cumplimiento de las profecías”.

Agregan que, en el Evangelio de San Mateo, se narra que la gente alfombraba el camino por el que pasaría Cristo y gritaba: “Bendito el que viene como Rey en nombre del Señor. Paz en el cielo y gloria en lo alto”.

La segunda tradición litúrgica es la de Roma, que según ese portal “invita a entrar conscientemente en la Semana Santa de la Pasión gloriosa y amorosa de Cristo, anticipando la proclamación del misterio en el Evangelio de Mateo (26:14-27:66)”.

 

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