El embajador ecuatoriano, José de La Gasca, respondió casi de inmediato a las declaraciones de la canciller mexicana, Alicia Bárcena, quien hizo un llamado a "no olvidar ni normalizar" el ataque a la Embajada de México en Quito, capital de Ecuador.
"Condenamos enérgicamente las graves infracciones del actual Gobierno de Ecuador contra las normas más elementales de convivencia internacional, así como los principios de la Carta de las Naciones Unidas, con el asalto ilegal y violento en nuestra embajada en Quito la noche del 5 de abril", expresó Bárcena durante la Asamblea General de la ONU desde la sede en Nueva York.
México propone una "reforma urgente" en la ONU por el asalto a su embajada en Ecuador – https://t.co/9FFSDptVs8 –
La canciller mexicana abogó por la eliminación total del veto o al menos su restricción en casos de genocidio, crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerr… pic.twitter.com/yocadBFU0K
Frente a las declaraciones, De la Gasca intervino solicitando hacer uso del derecho a réplica, señalando que "Ecuador es un país que respeta el Derecho Internacional, así como los principios y valores de la Carta de las Naciones Unidas".
Agregó que Bárcena omitió mencionar que el caso está siendo procesado ante la Corte Internacional de Justicia, la cual, tras aceptar las garantías proporcionadas por Ecuador, rechazó la solicitud de medidas provisionales presentada por México.
José De La Gasca, embajador de Ecuador ante la ONU, responde a las declaraciones de la Canciller de México sobre la irrupción en la Embajada mexicana en Quito. https://t.co/shfaRgDkNHpic.twitter.com/cL9xiNFn2C
"Se presentaron verdades a medias. Los eventos anteriores al incidente del 5 de abril de 2024 destacan las circunstancias extraordinarias que llevaron a las autoridades ecuatorianas a ingresar a la misión diplomática para capturar a un fugitivo de la justicia, un hecho puntual con el objetivo de luchar contra la impunidad", dijo el embajador
Contexto del problema
Afirmó que el actual gobierno de México permitió que un ciudadano ecuatoriano, con dos condenas definitivas, ingresara y permaneciera en su Embajada en Quito como huésped.
Cuestionó que, a pesar de los esfuerzos diplomáticos de Ecuador, México no entregó a Glas, como correspondía, y en su lugar le otorgó asilo político. En su opinión, el gobierno mexicano violó las convenciones sobre asilo político, las cuales prohíben conceder asilo a personas acusadas de delitos comunes y procesadas por tribunales penales.
Añadió que México "violó los principios de igualdad soberana", así como los de integridad territorial y no injerencia en los asuntos internos de otros Estados.