Ecuador
El 2020 marca récord en el decomiso de drogas en Ecuador, que se ha convertido en la ‘autopista’ del narcotráfico en la región
En cuanto al narcotráfico, la organización InSight Crime catalogó a Ecuador como la autopista de la cocaína en la región, a finales de 2019. Según esos cálculos, el 30 % de la droga que se producía en Colombia pasaba por el país, reseña el portal Primicias.
Desde la frontera norte de Ecuador, la mercancía ilegal se llevó a puertos ecuatorianos. Se buscaba transportarla a través de embarcaciones. Con ello, nació una nueva ruta de tráfico hacia Centro y Norteamérica.
Año récord en Ecuador
Esta problemática se refleja también en el volumen de decomisos de droga que se ha hecho en el país en 2020. Hasta mediados de noviembre, el país ya superó las 110 toneladas de incautaciones.
Así lo asegura el subdirector de Investigación Antinarcóticos de la Policía Nacional, Erik Benítez. Además explicó que el 80 % de la droga que sale del país se dirige a Europa. Por otro lado, Benítez asegura que, sin duda, el 2020 será un año récord en cuanto a decomisos de estupefacientes. Incluso, estima que se sobrepasará el volumen de decomisos más alto en la unidad policial, logrado en 2016. Hasta la fecha se han incautado más de 120 toneladas de droga en el país, cifra que supera con creces a la de 2019, cuando se decomisaron 72 toneladas
Este año apareció la crisis provocada por la pandemia de COVID-19. Esto obligó al negocio del narcotráfico a adaptarse. Ahora se profundiza un fenómeno que ya se registraba años atrás.
El coordinador del Observatorio Ciudadano de la Política de Seguridad (OCSI) y exjefe de inteligencia militar, Mario Pazmiño, explica que Ecuador se ha convertido en el centro de acopio de la droga que se produce en Colombia. El funcionario explica que las rutas y las principales plataformas de exportación de la droga (pistas y puertos clandestinos) están en Ecuador, donde se acopia la droga antes de que ser enviada a su destino final.
Sin embargo, no es la primera vez que este negocio ilegal ha tenido que adaptarse a nuevas condiciones. Las iniciativas regionales y nacionales de control han obligado a los grupos delictivos dedicados al narcotráfico reinventarse constantemente en los últimos años.
Primero pasó entre 2004 y 2005. En Colombia, bajo la presidencia de Álvaro Uribe, se destruyeron cientos de hectáreas de cultivos de coca. En aquel entonces se asentaban, especialmente en la frontera de ese país con Venezuela.
Por esta razón, los cárteles colombianos y mexicanos que operaban en esa zona tomaron la determinación de mover el negocio hacia el sur, en la frontera colombiana con Ecuador. Así lo registran los reportes de la época. (I)
Pandemia obliga a adaptarse