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"Me costaba respirar, es como resucitar": la trágica historia de un soldado de Ucrania que fingió su muerte para sobrevivir

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La familia Kulichenko no imaginaba que sus vidas pudiesen cambiar drásticamente con la llegada de los rusos al pueblo de Dovzhyk, Ucrania; pero el panorama cambió por completo cuando el soldado Mykola y sus hermanos fueron secuestrados y torturados por los rusos.

La pesadilla familiar inició luego de que una columna rusa sufriera un bombardeo y los soldados de las fuerzas armadas rusas iniciaran la búsqueda de los responsables en el pueblo de Dovzhyk.

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Mykola se encontraba en su casa junto a sus hermanos Dmyto y Yevhen cuando los rusos llegaron en búsqueda de los responsables, relató Mykola Kulichenko a CNN.

Los rusos encontraron en la vivienda familiar algunos implementos de la fuerza armada por lo que decidieron llevárselos a un lugar desconocido.

Mykola Kulichenko fue enterrado vivo por los rusos

Los hermanos Kulichenko fueron interrogados durante tres días consecutivos por los soldados rusos, quienes pretendían sacarles información torturándolos y golpeándolos hasta que perdieran el conocimiento.

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"Me golpearon todo el cuerpo con una barra de metal y me metieron el cañón de un arma en la boca", explicó Mykola.

Los hermanos creían que volverían a sus casas, pero eso no pasaría, al menos no para dos de ellos. Los soldados rusos trasladaron a Mykola y sus hermanos con los ojos vendados, atados de pies y manos a un terreno desolado.

En el lugar los rusos cegaron la vida de Dymto y Yevhen. El próximo era Mykola, pero el tiro que le propinaron en su boca salió detrás de su oreja y él se hizo el muerto.

Los soldados rusos creyeron que todos habían muerto y los enterraron en un pozo.

El soldado fue ayudado por una  mujer

Mykola se aferró a la vida. Como pudo salió de debajo de su hermano Dymto y llegó a la superficie.

"Me costaba respirar, ya que Dima (Dmytro) estaba acostado encima de mí, pero usando mis brazos y rodillas, pude empujar a mi hermano mayor hacia un lado del pozo y luego salí".

Mykola solo pensaba en el recuentro con su hermana y padre después de los cuatro días más largos de su vida. Caminó toda la noche por el campo hasta llegar a la casa de una mujer que sin pensarlo lo socorrió.

“Es un milagro que haya sobrevivido. Es como resucitar”, afirmó Mykola a CNN.

Las heridas ocasionadas por la perforación del tiro son visibles. Durante la entrevista, Mykola hace hincapié en que contó con suerte por lo que pidió que su historia sea conocida no sólo en Ucrania, sino en el mundo entero al asegurar, que este era un caso de miles.

(I)

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