Episodio psicótico la salva de ir a la cárcel: una mujer celosa apuñala a hombre en la cabeza porque la rechazó y un juez la deja en libertad

En medio de un episodio psicótico, Alisha Oakley apuñaló al hombre que la habría despreciado un beso. Como Reece Tyler fue identificado la víctima a quien la mujer le propinó una herida punzopenetrante en la cabeza.

Alisha, Tyler estaban tomando Vodka en una fiesta con algunos amigos en común. De repente Oakley intentó besarlo y este la rechazó, reseña Daily Mail.

Minutos después, la mujer, de 23 años, encontró a Tyler acostándose con otra mujer en una de las habitaciones del lugar. Está perdió el control y le enterró el cuchillo en la nuca.

Reece Tyler fue trasladado de emergencia al hospital donde se determinó que el cuchillo no alcanzó el cerebro de la víctima por solo dos centímetros.

Dictamen del juez salva a la mujer de la cárcel

Pruebas psiquiátricas determinaron que la joven sufría de inestabilidad emocional y que el día del ataque sufrió un episodio psicótico, por lo que el juez Stuart Trimmer QC, dejó a Alisha Oakley en libertad.

Jealous Alisha Oakley, 23, who stabbed a man in the head after she found him with another woman at a party just moments after he rejected her has avoided jail. pic.twitter.com/x38jW2OlQk

— Apex World News (@apexworldnews) June 7, 2022

"Estoy preparado en las circunstancias muy inusuales en este caso, como el punto de partida de uno que me permite suspender la sentencia, que es lo que voy a hacer", afirmó Trimmer.

La joven había recibido una sentencia de dos años de prisión por el Tribunal de la Corona de Canterbuy, pero fue llevada a 18 meses, luego de que se declarara culpable. Oakley debe someterse a un programa de rehabilitación de drogas por lo sucedido.

La abogada de Oakley, Anna Chestnut, aseguró que la joven no ha vuelto a delinquir y que está siendo tratada con medicamentos antipsicóticos.

Víctima exige justicia

La víctima no recibió compensación, puesto que la joven no tiene como pagar. Tyler calificó de "indulgente" a los tribunales, por no meterla a la responsable en prisión. Aseguró que desde entonces sufre de mareos que afectan su vida personal y laboral.

"Tengo suerte de estar vivo y aquí. Es una locura lo que me ha pasado. El asalto podría haberme dejado con daño cerebral o, en el peor de los casos, podría haber muerto", dijo.

Reece Tyler manifestó que además sufre de ansiedad. “En este caso, el castigo no se siente lo suficientemente firme, no parece que se haya hecho justicia.
(I)