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Los programas que estimulan el despertar de la consciencia y la meditación pueden aumentar los comportamientos egoístas
La atención plena, “consciencia” o “mindfulness” y la meditación pueden hacer que algunas personas sean más egoístas. Estas prácticas se popularizaron como una herramienta para ayudar a aliviar el estrés y reducir la ansiedad, pero los científicos descubrieron que tiene efectos secundarios desconocidos según el tipo de persona que lo usa.
La “mindfulness” se entiende como prestar más atención al momento presente, a los propios pensamientos y sentimientos, y al mundo circundante. Es lo que se llama “estar aquí y ahora”. Inicialmente se desarrolló en Asia Oriental y se convirtió en una herramienta de moda en las culturas occidentales en los últimos años.
Académicos de la Universidad de Búfalo en Estados Unidos realizaron dos experimentos con más de 300 voluntarios cada uno. Los participantes fueron interrogados para determinar si eran más independientes o interdependientes, social y económicamente, y luego participaron en una actividad de atención plena.
Después de una meditación se invitó a los participantes a cooperar en actividades benéficas. Los resultados mostraron que la atención plena hizo que aquellos más independientes fueran un 33% menos propensos a ser voluntarios y los interdependientes respondieran con un 40% de mayor empatía hacia la colaboración. Según los investigadores, la consciencia, meditación y la atención plena están vinculadas al narcisismo y los sentimientos de superioridad espiritual. Entre sus efectos adversos se detectó que aumenta la necesidad de las personas de sentirse “más exitosas, más respetadas o amadas”. (E)