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Los paseos no deben ser un suplicio: Sigue las recomendaciones del experto en educación canina para disfrutar las caminatas junto a tu perro
El paseo es una de las actividades imprescindibles para el perro, ya que le permite hacer sus necesidades, socializar o ejercitarse si le es posible.
Sin embargo, las caminatas no solo benefician al can sino también a sus dueños, puesto que está comprobado que estas les pueden ayudar a mitigar los niveles de estrés y ansiedad.
En la mayoría de los casos, el paseo con el perro termina siendo un suplicio en vez de ser algo placentero. Esto debido a que el animal tiene un comportamiento inadecuado. El educador canino, Octavio A. Lozano, sostiene que para que los paseos resulten tranquilos y agradables es necesario que el dueño fortalezca el vínculo afectivo con su mascota. “Las personas deben ser buenas guías, y para esto, deben trabajar con sus perros a tal punto que les ellos hagan caso no porque se sientan obligados sino porque quieren a sus dueños”, asegura. Un estudio realizado en Tokio revela que pasear con un perro es mejor para la salud de las personas que caminar solas.
Agrega que quienes tienen canes deben esforzarse por guiarlos en todo momento y no ser sus “padres” o sus mejores amigos como comúnmente se dice. Estas son las recomendaciones del experto para disfrutar de paseos y caminatas junto a su perro.
Correa: Lugar adecuado: Rutinas: Manejo: Tiempo: (I)
Evite ponerle el collar de forma forzada. El perro debe estar relajado antes de iniciar el paseo. Esto garantizará que tanto usted como el animal puedan disfrutar de la actividad.
Si es un perro que tiene hiperactividad o padece de ansiedad no lo lleve a zonas concurridas o con mucho ruido. En estos casos, el experto aconseja que el paseo sea progresivo; es decir, que la mascota visite este tipo de lugares poco a poco.
Los perros son rutinarios. Lozano aconseja establecer horarios como rutinas, ya que esto favorece su nivel cognitivo. Al pasear a su mascota en una hora establecida le transmite una sensación de estabilidad, confianza y tranquilidad, incluso cuando está fuera de casa.
Procure que el perro camine a su izquierda sin tirar la correa. Intente caminar de forma relajada, guiándole y deteniéndose cuando el animal tenga que hacer sus necesidades. Evite correr, gritar o intentar que el perro esté pendiente de usted.
Esto varía según la raza, la edad o las necesidades de cada animal. De forma general, un perro necesita pasear entre 40 minutos y dos horas, repartidos entre dos y tres paseos al día.