Identidad azuaya se exhibió en obras de arte durante exposición en el Seminario San Luis

Detrás de las perfectas esculturas en madera, las coloridas macanas y los laboriosos sombreros de paja toquilla, están hábiles manos azuayas que día a día trabajan por mantener el oficio que heredaron de sus antepasados.

Estos talentos se mostraron por cuatro días consecutivos en la exposición ‘Identidad Cultural del Azuay’, realizada en el Seminario San Luis, donde participaron 12 expositores.

Una de ellas es Carmen Maldonado (50 años), de Bullcay, Gualaceo, quien elabora ponchos y macanas. Comenta que aprendió el oficio de sus abuelos y padres a los 12 años.

Carmen señala que en la semana se produce dos macanas y cada una se comercializa en $40. “Se demora hasta teñir en negro, abrir los nudos del diseño y se pone a secar”, dijo.

Al igual que Carmen, Celina Sánchez (44 años) a los 19 años ya expuso su primera escultura de madera, en Sígsig.

Con precisión y con la ayuda de formones y gurbias, Celina crea obras de arte religioso, costumbristas, entre otras.

La hábil mujer, que actualmente tiene su taller en la calle Tomás Ordóñez y Rafael María Arízaga, heredó el oficio de su padre, el artista Guillermo Sánchez, de Sígsig.

Natali Vázquez, coordinadora del Departamento de Turismo de la Arquidiócesis, informó que para la exposición se unieron esfuerzos con la Casa de la Cultura y Go Galería de Oficios, con la finalidad que los visitantes no solo compren, sino que aprecien y valoren el arte azuayo. (I)