Si Trump cumple su promesa de deportar a ciudadanos ilegales, Ecuador recibiría a 500 mil compatriotas

Una de las promesas de Donald Trump para llegar a la Casa Blanca fue deportar a más de un millón de personas en situación de ilegalidad durante su primer año de gobierno. De cumplirse esa postura, entre 300 mil y 500 mil ecuatorianos podrían ser repatriados.

El director de 1800 Migrante, William Murillo, alegó que eso sería un golpe para la situación económica y social de Ecuador. Explicó que los ciudadanos propensos a esta decisión, son aquellos que llegaron a Estados Unidos (EE.UU.) hace más de 10 años y no logran arreglar su estatus legal. Mientras que los estudiantes y quienes solicitaron asilo en ese país podrían estar exentos del proceso, al menos, por un tiempo.

Murillo anticipó que el Gobierno Nacional y las autoridades locales deben acordar políticas públicas y adecuar espacios para recibir a los compatriotas. Explicó que, ante el peor escenario, la Cancillería dialoga con los consulados y la Embajada. Además, organiza pasaportes de emergencia y prepara al personal consular para atender a los ciudadanos sin papeles. Sin embargo, enfatizó que esas medidas no serán suficientes para la "avalancha" de deportaciones.

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"Hay varios ciudadanos que podrán pelear los casos, pero hay algunos que ya tienen una orden de deportación en firme. Se trata de quienes no tuvieron un debido proceso y las autoridades solo tienen que encontrarlos y deportarlos. En el grupo, ingresan los criminales, y otros que no se presentaron a la Corte", exclamó Murillo en Teleamazonas.

El Estatus de Protección Temporal

En enero de 2024, la ministra de Relaciones Exteriores, Gabriela Sommerfeld, envió la solicitud escrita y formal a EE.UU. para que los ecuatorianos ingresen al Estatus de Protección Temporal (TPS). El sistema otorgaría un beneficio migratorio al país para que sus ciudadanos tengan una "estancia tranquila" por 18 meses. Las autoridades ecuatorianas esperan una respuesta al trámite. Para Murillo, el Ejecutivo debe insistir en este proceso y organizar mesas de diálogo para fijar el caso antes de que Trump asuma el mandato.

El director de 1800 Migrante insistió en que el proceso ayudaría a que los compatriotas no estén en el limbo de las deportaciones. Además, sería el primer paso para afianzar los caminos reales de la regularización total de los ecuatorianos. El TPS ayudaría a 700 mil compatriotas.

"Esto va más allá de una cuestión política, se trata de un respiro para los migrantes. Noboa debería conversar con Joe Biden para dar el último empujón. Las relaciones diplomáticas le otorgan a Ecuador una oportunidad de oro para ser práctico", repitió Murillo.

Resaltó que las autoridades deben implementar políticas migratorias, atender sus necesidades y elaborar mesas de negociación. Resaltó que la prioridad en temas comerciales y de seguridad hace que los migrantes queden desamparados.

"Si regresan los 500 mil ecuatorianos, las remesas caerán y golpearían la economía global y local. Varios de los cantones que reciben millones de dólares por este proceso se verán afectados. Deben definirse cuáles son los espacios para su vuelta o los programas de emprendimientos para que apliquen sus capacidades", apuntó el director de la entidad.

(I)