Ecuador
Muere ballena que había quedado varada en playa de Lima
LIMA/AFP
Una ballena que estuvo varada en una playa de Lima murió tras agonizar varias horas debido a sus heridas, informó este miércoles la Ong local Orca.
"Lamentablemente la ballena murió por sus profundas heridas en playa Santa Rosa, no pudo resistir no estar en altamar", dijo a la AFP Carlos Yaipén, médico veterinario marino y director de la ONG Orca. "Sabíamos que el caso era difícil, la ballenita tenía pronóstico reservado", indicó Yaipén, quien participó en las labores de rescate del cetáceo. Surfistas y policías trataron de salvar el martes a la ballena herida que permaneció varada varias horas una playa del sur de Lima.
El mamífero de más de cinco metros amaneció atrapado entre rocas y peñascos en el balneario San Bartolo, donde un grupo de surfistas lo encontró y avisó a los rescatistas. El cachalote, de unos tres años de edad, fue trasladado mar adentro por una patrullera de la Marina sujetado por unas fajas, pero no pudo sobrevivir por las profundas heridas que le ocasionaron gran pérdida de sangre, señaló el médico veterinario.
Yaipén explicó que los cachalotes "ingresan en grupos familiares a las costa limeñas atraídas por la abundancia de calamares gigantes que por esta temporada abundan por la costas limeñas, pero también atraen a depredadores como tiburones y ballenas orcas que los atacan".
Los cachalotes se distribuyen en los hemisferios norte y sur, desde los trópicos hasta las regiones polares.
En el mar peruano se han observado cachalotes, principalmente frente a las costas de Paita (norte), cerca de la frontera con Ecuador, y en Pisco e Ilo (sur), donde se ubican las principales zonas de caza incidental.
En lo que va del año, al menos ocho ballenas han quedado varadas heridas en la costas peruanas, según la ong Orca.
En la ciudad costera de Chiclayo, una ballena de especie jorobada juvenil murió la semana pasada tras quedar varada en las orillas de la playa Lagunas. Pobladores, soldados del ejército y marineros trataron de regresarla al mar, pero el cetáceo de 10 metros murió por sus heridas.
Observar ballenas es una veta de la oferta turística en Perú. (I)