Ecuador
Ballena jorobada fue rescatada luego de encontrarla varada en las costas de Esmeraldas
La playa Camarones fue el escenario en el cual se logró rescatar a un espécimen juvenil de ballena jorobada (Megaptera novaeangliae), de ocho metros de largo, que se encontraba varada en las costas esmeraldeñas. Esta actividad se realizó en coordinación con guardaparques de la Reserva Marina Galera San Francisco, miembros de la Armada del Ecuador y pescadores de la zona.
Luego de cuatro horas de trabajo, que inició con la activación del protocolo de respuesta rápida de fauna marina en caso de varamiento, este espécimen pudo regresar a su hábitat natural, sin lesiones ni heridas, después de ser liberada de las mallas de pesca enredadas en sus aletas pectorales y caudal que impedían la libre movilidad del cetáceo.
Los guardaparques Daniel Vera y Geovanny Gallegos, quienes participaron del rescate, señalaron que el espécimen se encontraba vivo a 300 metros de la línea de costa. “Para retirar las mallas fue necesario realizar inmersiones junto al animal, una situación que conlleva sus riesgos pero que en esta ocasión fue exitosa”, indicaron. Marcela Cevallos, directora Zonal de Ambiente y Agua de Esmeraldas, pido a los pescadores evitar que esas redes de pesca queden en el mar “porque en caso de varamiento es poco probable que las ballenas puedan sobrevivir por las características propias del animal. Los residuos de la actividad de pesca ocasionan grandes afectaciones a la fauna marina y su ecosistema”. Sobre las ballenas jorobadas
Cada año, entre junio y septiembre, cientos de ballenas jorobadas llegan desde la Antártida a las costas ecuatorianas, ofreciendo un magnífico espectáculo a los turistas nacionales y extranjeros que acuden a observarlas. Estos mamíferos recorren aproximadamente 8000 kilómetros en busca de las corrientes cálidas, que ofrece nuestro país y que son idóneas para su reproducción.
Las principales causas de su vulnerabilidad es la caza indiscriminada que se realizó durante el siglo XX por el ser humano. Se estima que existen alrededor de 15 000 ballenas jorobadas en todo el mundo. (I)