El vicepresidente del Frente Unitario de Trabajadores, José Villavicencio, explicó que las movilizaciones buscan respuestas concretas frente a la inseguridad, salud y educación.
Hasta la noche del jueves, la comuna permanecía cercada por efectivos policiales y militares, mientras organizaciones sociales alertaban sobre personas heridas y afectadas por gases lacrimógenos.
La Conaie rechazó las acusaciones de terrorismo e intento de asesinato y denunció presuntos tratos inhumanos hacia las personas detenidas durante el operativo.
El burgomaestre calificó como absolutamente reprochables las declaraciones del presidente de la Conaie, y lamentó que las movilizaciones hayan dejado una persona fallecida.
Organizaciones sociales mantienen sus demandas, mientras el Gobierno ha reiterado que no revisará la decisión sobre los subsidios.
Autoridades alertaron que el abastecimiento de oxígeno y otros insumos médicos en Otavalo se han visto limitados debido a los cierres viales que persisten en Imbabura.
Los protestantes expresaron su rechazo a las medidas económicas del Gobierno de Daniel Noboa en el marco del paro nacional 2025.
El consejo ampliado definirá si las movilizaciones continúan o si se abre un espacio de diálogo con las autoridades.
Entre las denuncias se mencionaron la militarización de comunidades y el uso de armas letales. También se habló de criminalización y difamación contra los pueblos indígenas.
Según datos oficiales, hasta el jueves, 25 de septiembre se registran 85 personas detenidas en el marco del paro nacional.