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Las razones que convirtieron a Demon Slayer en la película más taquillera de la historia en Japón
Kimetsu No Yaiba, mejor conocida en el mundo occidental como Demon Slayer, coronó un año espectacular con un rotundo éxito en el cine de Japón. Le película, basada en el manga y anime del mismo nombre, se convirtió en la producción más taquillera de la historia en el territorio nipón. Recaudó un total de 32.470 millones de yenes (314 mil millones de dólares) y desplazó a Sen to Chihiro no Kamikakushi, que estaba en la cima desde el 2001.
De la mano de los distribuidores Aniplex Inc y Toho Co, la película atrajo alrededor de 24 millones de personas a las salas de cine desde el pasado 16 de octubre, según lo reseñó el portal Ismorbo.
Demon Slayer tiene una trama que sabe como combinar las emociones fuertes con los tiempos para relajarse. A diferencia de muchas series animadas de Japón, no se alarga mucho y resuelve los nudos en el momento justo. Kimetsu No Yaiba desarrolla su trama en un Japón antiguo de hace aproximadamente 100 años.
Entonces cuenta con una relación que destaca los efectos sobrehumanos y elementos históricos del momento. Refleja la cotidianidad de lo que pasaba en la época, con los poderes místicos, típicos de la cultura asiática. Finalmente, están los villanos de esta historia, que de no ser impresionantemente poderosos y misteriosos, no existiría el éxito. Son una especie de legión demoniaca que sirve a un amo. Todos manejan las peleas como unos verdaderos artistas marciales y entregan a los fanáticos unas secuencias inigualables, en este maravilloso mundo animado. (E)