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¿Por qué se regalan flores amarillas el 21 de septiembre?: descubre su origen y significado

La costumbre de obsequiar estos detalles no nació como una tradición popular, sino en la pantalla chica.

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Cada año, el 21 de septiembre las flores amarillas toman protagonismo en Ecuador y otros países de la región. Calles, mercados y redes sociales se llenan de ramos y arreglos de este color, mientras miles de personas buscan entregarlos como un gesto especial.

La costumbre no nació como una tradición popular sino en la televisión. A mediados de los años 2.000, la telenovela juvenil Floricienta incluyó una canción llamada "Flores Amarillas", que hablaba de recibir este obsequio como símbolo de amor. Desde entonces, la idea se extendió y tiempo después se volvió tendencia en plataformas digitales.

En su origen, los colores amarillos en la naturaleza se relacionaron con la llegada de la primavera en el hemisferio sur, que comienza en esta fecha del año. El color se asocia con optimismo, amistad y nuevos comienzos, por lo que muchas personas lo dan como un obsequio.

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En Ecuador, la fecha coincide con un aumento visible en la venta de flores. En Quito y Guayaquil, comerciantes reportan que los precios de girasoles y rosas amarillas suben debido a la alta demanda. Un girasol puede llegar a costar hasta $ 2  y una rosa amarilla alrededor de $ 1.

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Aunque el país no celebra de forma oficial la llegada de la primavera, el 21 de septiembre se ha convertido en una fecha marcada para las parejas ecuatorianas. Lo que empezó como un detalle televisivo ahora mueve el comercio local y suma un nuevo significado cultural a las flores amarillas.

(I)

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