Comunidad
Misa, procesión y juegos pirotécnicos en comuna peninsular Sucre por la Virgen de la Inmaculada Concepción
La comuna peninsular de Sucre celebró con fervor los 15 años de la llegada de la imagen de la Madre de Dios.
Redacción/Santa Elena
En la pequeña iglesia San Juan Bautista, en la comuna Sucre al sur de la provincia de Santa Elena, no cabía un alma la noche del pasado sábado 6 de diciembre de 2025. Vestidos, camisas manga larga, ternos y hasta encorbatados lucieron los cerca de 300 feligreses que acudieron al templo católico para ser parte de las celebraciones por los 15 años de la llegada de la imagen de la Virgen de la Inmaculada Concepción al recinto, perteneciente a la parroquia Chanduy, cantón Santa Elena.
Las campanas de la iglesia empezaron a sonar antes de las 18:00, hora en que estaba programada la ceremonia religiosa. Tres horas antes, la imagen que estaba adornada con rosas y una especie de velo rosado, partió desde la hermana comuna de Villingota hasta el citado templo. Los feligreses acompañaron a la virgen durante el periplo que duró aproximadamente una hora.
Durante toda la jornada, la Virgen aguardaba en el templo, rodeada de flores. Foto: José Tumbaco/Quenoticias.com
Maribel Orrala Malavé, del grupo católico Legión de María, detalló que la jornada fue planificada varios meses atrás y se ejecutó desde el viernes 5 con la visita de la imagen a Villingota. Luego de la misa la banda María Auxiliadora, que llegó contratada desde Guayaquil, entonó varios temas para dar paso al espectáculo de vacas locas y al encendido de un castillo de 4 metros de altura, al igual que decenas de juegos pirotécnicos que iluminaron el cielo.
Cristel Espinoza y su abuela Leonor Lindao fueron parte de la feligresía que se deleitó con el show nocturno. Ellas llegaron con la pequeña Maité, hija de Cristel, y su esposo Álex Angulo, y se retiraron felices por todo lo que vieron. La gestión de la agrupación, que incluyó actividades de autofinanciamiento y el auspicio de varios creyentes, también incluyó la entrega de 350 tarrinas de comida, una torta gigante con la imagen de la virgen y bebidas gaseosas.