En 17 años y por 900 millones de dólares se ejecutará la estrategia para la descontaminación de los ríos de Quito: El Municipio ya anuncia avances y recursos

El Municipio de Quito afirma que ya hay avances para poner en marcha la Estrategia de Descontaminación de los Ríos de Quito. Este viernes, 13 de septiembre de 2024, en un evento con el alcalde Pabel Muñoz, se realizó la presentación oficial  con la comunidad.

Con esta propuesta se reemplaza al proyecto Vindobona que tenía el mismo fin, pero que según anunció Muñoz en junio de este año, se descartó por el excesivo costo que le representaba a la ciudad. Ahora se prevé construir una serie de plantas de tratamiento de aguas residuales en varios puntos de la capital, para llegar a cubrir la totalidad de aguas servidas en unas dos décadas más.

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Aún así, Vindobona constituye la base para el rediseño de la nueva estrategia, según expuso hoy Verónica Sánchez, gerente general de la Empresa Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps). Esta se ejecutará en un plazo de 17 años por $ 900 millones, para hacerlo "financieramente viable", se constuirá por fases.

Desde 2019 opera la Planta de Tratamiento de Aguas Resituales (PTAR) Quitumbe, la cual han designado para que sea el ejemplo de cómo funcionarán las demás que se prevé construir. Se trata de cinco componentes en los que se levantará varias infraestructuras en ciertas zonas del Distrito.

En el primer componente estará la planta más grande de la ciudad, a la que llaman PTAR Quito, que beneficiará a la zona urbana y parroquias surorientales. Para esta próximamente se contratarán los diseños.

Pero, según manifestó en el evento Irina Moncayo, técnica de Epmaps que lidera el proyecto, ya existe un avance del 35 % en las consultorías para el diseño de la planta de Checa y de la Merced. Además, se confirmó que ya se obtuvo los recursos para la PTAR de Tumbaco, que será la segunda más grande del complejo, cuyo costo es de $ 75 millones los cuales cubrirá la CAF. 

Maqueta del proyecto de las PTAR en Quito.

Los componentes de la estrategia en Quito

Actualmente la capital ecuatoriana ya cuenta con 37 sistemas de tratamiento más pequeños. Además de la planta de Quitumbe, hay sistemas en algunas de las parroquias nororientales.

A estas se sumará 22 plantas de tratamiento de aguas residuales, las más grandes serán la PTAR Quito, Tumbaco, Calderón y Río Monjas. En esta administración se espera llegar a iniciar las construcciones del Chocó Andino -Lloa y de la Ruta Escondida.

"Esta planta o esta opción (Vindobona) que era de más de mil millones de dólares se suponía que permitiría tratar todas las aguas residuales de la parte urbana de la ciudad, pero hoy en cambio tenemos un planteamiento de menor costo, ya no solamente para las partes urbanas, sino prácticamente para el 100% de las aguas residuales de la capital", dijo el alcalde.

Por parte de las comunidades en las que se instalará las plantas hay apoyo, así lo manifestó Mercedes Luque, presidenta del Gobierno parroquial de Calderón, quien afirma que conocen perfectamente cómo funciona el proyecto y hay expectativa en la zona. "Es una necesidad … en Calderón tenemos varias quebradas contaminadas … la mayoría de los habitantes están de acuerdo", dijo la representante.

Mientras que en Quitumbe, aunque ya existe una planta que se encarga de las aguas servidas, su cobertura es muy limitada, al menos así lo aprecia Norma Cuvi, quien asegura que más tipos de contaminación, debido a la presencia de camales clandestinos y otras fuentes, afectan a la quebrada Chanchayacu, por lo que quieren que la cobertura se amplíe.

(I)