Día de la Madre: La doctora Viviana Chávez tuvo que sacar adelante a su hija y a su carrera al mismo tiempo

Viviana Chávez es una médico emergencióloga de trayectoria, quien actualmente se desempeña como jefa de Emergencias de un reconocido hospital de Quito. A sus 41 años y en medio del ajetreo diario, recuerda cómo se convirtió en mamá y los retos que esto le representó en su vida, junto con su carrera. Esta es su historia, a días de celebrar el Día de la Madre en Ecuador.

A la par creció como profesional y como mamá, pues se dio cuenta que estaba embarazada en apenas el primer semestre de Medicina. Y sí, a Chávez le tocó criar a su pequeña en soledad, y aunque el panorama parecía desalentador, tomó las riendas tanto de sus estudios como de su nuevo rol y siguió adelante.

María Alejandra, su hija, creció entre los corredores de la Facultad de Medicina de la Universidad Central y de las casas de salud en las que su madre tenía guardia. Aunque la madre de Viviana la apoyaba con el cuidado de la menor, muchas veces tuvieron que pasar juntas en el hospital.

"Ella iba conmigo a las guardias cada cuatro días. Yo la llevaba al hospital porque no tenía con quién dejarla", cuenta recordando esa época. Eso ocurrió cuando estuvo en su último año de Internado y comenta que ya todos en el lugar la conocían y hasta ayudaban a echarle un ojo en la residencia, cuando su madre tenía que atender pacientes.

Según cuenta la profesional de la salud, siempre tuvieron que adaptarse a las situaciones que se le presentaban, primero por sus estudios, luego por su trabajo, siempre con el apoyo de su mamá. Y aunque reconoce que fue duro, su motivación ha sido el bienestar de ambas.

Su hija sigue sus pasos

Aunque para Chávez fue complejo, estrenarse como madre y como profesional, de eso ya han pasado 20 años y puede decir con certeza que lo ha logrado. Ahora María Alejandra ha optado por ser como su mamá y también estudia Medicina.

Y cómo no, si prácticamente  creció viendo a su progenitora ayudar a la gente y salvar vidas. Como dos mujeres que se apoyan mutuamente, Viviana comenta que en conversaciones con su hija, ella le ha confesado que la admira por lo que ha logrado y le da las gracias porque todo lo que ella es ahora se debe a su trabajo.

Por supuesto Chávez es una madre orgullosa y está feliz de cosechar lo que tanto esfuerzo le costó. Aunque por su profesión aún debe realizar turnos, sus días son más llevaderos sin la precupación de no tener con quien dejar a su niña. María Alejandra la espera en casa y cuando pasan juntas incluso conversan sobre los casos clínicos que lleva.

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También tuvo que soportar prejuicios

Aunque rendirse no era opción para la emergencióloga, recuerda también que hubo personas que poco le aportaron en su vida. Durante sus estudios universitarios lamenta que algunos profesores le hayan reprochado su presencia como estudiante y mamá.

"Me decían que yo debía retirarme, que mi lugar era estar en la casa, no estar estudiando. Que yo ya tenía un hijo y que no entendían qué era lo que yo hacía ahí intentando seguir una carrera tan difícil", fueron las palabras que recibió de algunos médicos.

Afortunadamente Viviana hizo de oídos sordos y continuó con su decisión de ser profesional. "Sabía que debía seguir, que era el único camino que podía sacarnos adelante a las dos", expresa.

Además, también como catedrática, sabe que frases de ese tipo pueden cambiar la vida de los estudiantes, por lo que reflexiona: "qué importante es que las personas que están alrededor de estas madres que tal vez son jóvenes o son solteras, las guíen bien y les den ánimo y les digan que pueden hacer lo que son capaces". 

Por tanto, luego de su experiencia, su mensaje a las madres en su día, que se celebrará este 12 de mayo de 2024, es que nunca se subestimen al momento de cumplir sus sueños. Especialmente se dirige a las mamás jóvenes y que están solas, les recuerda que aunque la situación es difícil "con amor, perseverancia y confianza" se puede lograr.

El Día de la Madre de Viviana

Ya que su profesión la requiere cuando menos lo imagine, Chávez pasará este domingo de turno, en el hospital en el que labora. Cuando se presenta una situación así, dice que les toca adaptarse, ahora que su hija es adulta, la va a visitar en su trabajo, comen algo juntas y en cuanto termina de trabajar se reencuentran en casa.

(I)