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Desarticulan banda que desmantelaba autos robados y enviaba autopartes por courier desde Quito

Los GDO contactaban a estas bandas cuando requerían vehículos para actividades delictivas.

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Una banda que desmantelaba vehículos robados y enviaba autopartes por courier fue desarticulada en Quito. Cuatro personas fueron detenidas.

La Policía Nacional ejecutó seis allanamientos la tarde y noche de este lunes 8 de julio de 2025. Los operativos se realizaron en el Comité del Pueblo, Llano Grande, Pomasqui y Mitad del Mundo, tras tres meses de investigaciones. Los detenidos formaban parte de una organización dedicada al robo de camionetas en Quito. También operaban en otras provincias como Imbabura, Cotopaxi y Chimborazo.

¿Cuál era su modus operandi?

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Los sujetos recorrían diferentes zonas para identificar vehículos. Una vez robados los trasladaban a una bodega. Allí los desmantelaban para convertirlos en autopartes. Las piezas eran almacenadas en una vivienda ubicada en el Comité del Pueblo, en el norte de la ciudad. Luego, subían fotografías a redes sociales para vender los repuestos.

Una vez cerrada la venta enviaban las autopartes por servicio courier a otras provincias. La Policía detectó envíos hacia la Costa, Imbabura y Cotopaxi. Uno de los aprehendidos tenía antecedentes por asociación ilícita. Se lo vincula con al menos cuatro robos ocurridos entre el 2 de abril de 2025 y el 25 de junio de este mismo año. 

En los allanamientos las autoridades recuperaron cinco vehículos. Retuvieron otros cuatro con fines investigativos. Asimismo, decomisaron lo siguiente:

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  • 72 accesorios y autopartes de vehículos
  • Una motocicleta aprehendida
  • Un chasis automotriz
  • Dos motores de vehículos
  • Un juego de troquel alfanumérico
  • Cinco terminales móviles
  • 50 gramos de sustancias estupefacientes.

Conexiones con bandas criminales

Según la Policía, esta banda colaboraba con Grupos Delictivos Organizados (GDO). En algunos casos los vehículos robados habían sido usados en delitos violentos, como sicariatos.  Los sospechosos se encargaban de desmantelar esos autos para eliminar rastros del delito. Así también reducían las probabilidades de que las investigaciones lleguen a los autores materiales.

Además, los GDO contactaban a estas bandas cuando requerían vehículos para actividades delictivas, de acuerdo con información proporcionada por la institución policial. De igual modo, se estima que un vehículo completo robado se comercializaba en $ 1.000 o $ 1.500. Cuando se vende por partes las ganancias pueden superar los $ 8.000.

(I)

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