San Cipriano: ¿Por qué ayuda en el amor imposible y a tumbar la brujería?
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¿Quién fue San Cipriano? Esta es la historia del hombre que dio su vida por defender sus creencias y el motivo por el que ayuda con la brujería y el amor imposible

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San Cipriano llegó al mundo rodeado de falsos dioses, magia blanca, hechicería, exorcismos, entre otros, por ser concebido en África por padres idólatras. Los primeros años de su vida vivió en el paganismo. No fue hasta los 35 años de edad que se convirtió en cristiano y luchó por sus creencias hasta la muerte. Debido […]

San Cipriano
Foto: Unsplash @fin777.
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San Cipriano llegó al mundo rodeado de falsos dioses, magia blanca, hechicería, exorcismos, entre otros, por ser concebido en África por padres idólatras. Los primeros años de su vida vivió en el paganismo. No fue hasta los 35 años de edad que se convirtió en cristiano y luchó por sus creencias hasta la muerte.

Debido a los conocimientos adquiridos durante su niñez sobre la brujería, San Cipriano se dedicó los primeros años de su vida a realizar este tipo de trabajos del más allá. Este santo sufrió dolor, tormento físico, verbal y emocional a manos de los emperadores Galileo y Valeriano, reseña Religiones del Mundo.

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¿Cómo llegó San Cipriano al cristianismo?

Pasar del paganismo al cristianismo fue un cambio radical y muy notorio que dio San Cipriano, siendo ejemplo para otros sobre la práctica de la austeridad. Esta decisión la tomó a los 35 años de edad.

Sus bienes patrimoniales los entregó al clero después de ser bautizado. En el año 249 participó en la elección episcopal y ganó por votación democrática. Se caracterizó por ser firme, fuerte y por sobresalir con sus opiniones ante sus confesores.

¿Cómo murió San Cipriano?

Durante su mandato en la iglesia de Cartago a mediados del siglo III, San Cipriano fue perseguido por todos aquellos que estaban en contra del cristianismo, tanto, que tuvo que ocultarse para evitar una tragedia, pero nunca se alejó de Dios, ni de la iglesia.

A través de cartas, este santo se comunicaba con los fieles dando continuidad a su mandato y volvió a su ciudad natal una vez su vida dejó de correr peligro.

No fue hasta el año 257 que el procónsul Aspasio, como forma de presión le dijo a San Cipriano que los romanos en contra de su religión, le habían dado la instrucción de que su culto no podía continuar. Ante esta posición, el santo reafirmó su fe y su creencia en Dios diciendo que él era el Obispo. Su confesión lo llevó a la muerte.

El  procónsul ordenó su exilio, razón por la que buscó refugio a Curubí. Aspasio fue relevado unos años más tarde y su sucesor llamó a Cipriano para que reafirmara su postura, acción que sin dudar reforzó y por ende, murió.

San Cipriano fue decapitado el 14 de septiembre del año 258 frente a sus fieles en una plaza pública, siendo ejemplo para los fieles de su adoración hacia Dios.

Relata la historia de este hombre mártir que gracias a su creencia, África es un país abierto a la lectura de la Biblia, puesto que fue el primer Obispo que por honrar a Dios derramó su sangre. Este santo mártir es honrado cada año los 16 de septiembre.

(E)

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REDACCIÓN

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